El tiburón punta blanca de arrecife es un tiburón dócil y nocturno que reside en aguas tropicales poco profundas y está estrechamente asociado con los hábitats de los arrecifes de coral. Con una longitud media de 1,6 metros, el tiburón punta blanca de arrecife se considera un tiburón de tamaño mediano, aunque puede crecer hasta 2 m. Este tiburón pasa el día en cuevas o grietas del arrecife pero se vuelve activo durante la noche. A lo largo de su vida, un tiburón de punta blanca permanecerá dentro de un pequeño radio de su cueva o grieta, regresando diariamente al mismo refugio. Este comportamiento ejemplifica lo que se conoce como fidelidad al sitio, y la distancia de viaje más larga registrada para esta especie fue de sólo 3 km. El tiburón punta blanca de arrecife se especializa en alimentarse en el fondo, ya que su boca ubicada ventralmente es perfecta para recoger cangrejos, almejas o pulpos del fondo marino; sin embargo, la dieta del tiburón se compone principalmente de peces de arrecife. Si bien el tiburón punta blanca de arrecife es ocasionalmente presa de tiburones más grandes, su mayor amenaza, con diferencia, es la sobrepesca por parte de los humanos. Actualmente, el tiburón punta blanca de arrecife figura como vulnerable en la Lista Roja de la UICN y su población está disminuyendo.
Tiburón punta negra
El tiburón punta negra es un tiburón robusto, gris y de tamaño mediano que se caracteriza por las marcas negras en las puntas de sus